Papeles inesperados

Blues for Maggie

[…] nada es serio ni digno de que se tome en cuenta,
nos hicimos jugando todo el mal necesario

[…] no es una carta esto,

nos dimos esa miel de la noche, los bares,
el placer boca abajo […]
cuando en el cielo raso tiembla la luz del alba

no te escribo, de pronto miro el cielo, esa nube que pasa
y tú quizás allá en tu malecón mirarás una nube
y eso es mi carta, algo que corre indescifrable y lluvia. […]


La mosca

Te tendré que matar de nuevo.
Te maté tantas veces, en Casablanca, en Lima,
en Cristianía,
en Montparnasse, en una estancia del partido de Lobos,
en el burdel, en la cocina, sobre un peine,
en la oficina, en esta almohada
te tendré que matar de nuevo,
yo, con mi única vida.

26 agosto, 2009

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